El objetivo es comprobar que los locales cumplen toda la normativa municipal, por ejemplo en cuanto a aforo, horarios de apertura y de cierre, venta de alcohol a menores y medidas de seguridad.

Además de la vigilancia del cumplimiento de estos requisitos, que busca garantizar tanto la seguridad de los clientes como el descanso de los vecinos de los locales, el Ayuntamiento comprueba también que los establecimientos sigan la normativa urbanística y cuenten con las licencias necesarias.

Actualmente la Policía Municipal de Madrid realiza de oficio al menos una inspección al año en cada local y en periodos del año como navidades o fin de año se realizan campañas específicas a determinados locales con gran afluencia de público.

Más allá de ese mínimo que se ha fijado la administración municipal, se realizan inspecciones en función de la demandas ciudadanas, de modo que los agentes acuden ante distintos tipos de requerimiento, por ejemplo por ruido o exceso de aforo, a comprobar esas supuestas irregularidades.

Éste es el caso del desalojo practicado en la madrugada del pasado día 17 en la discoteca MOMA de la calle de José Abascal, cerca del paseo de la Castellana, donde la Policía Municipal constató que había 1.510 personas cuando la licencia permite un máximo de 298.

Al final de la operación se levantó acta por infracción de la normativa aplicable de acuerdo a la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de la Comunidad de Madrid.

El Ayuntamiento de Madrid ha propuesto la máxima sanción estipulada a la discoteca, consistente en 24 meses de clausura y una multa de 300.506 euros por una infracción muy grave de la citada ley autonómica, que considera ese exceso de aforo "un grave riesgo para la seguridad de personas o bienes".

La del MOMA es la última de una serie de actuaciones que ha tenido trascendencia mediática.

Así, en un solo fin de semana del pasado mes de agosto se informó de que la Policía Municipal de Madrid actuó en tres locales de copas, dos en Centro y otro en Ciudad Lineal, que superaban el aforo permitido.

Estas intervenciones se producen tanto en locales grandes, como el MOMA, como pequeños, y por ejemplo en aquella ocasión en uno de ellos había 35 clientes cuando solo tiene capacidad para 16.

A finales de julio fueron desalojados otros dos locales de Centro por sobrepasar el aforo permitido, en uno de los casos en un 336 % y a mediados de ese mes fue desalojada otra conocida discoteca quecuadruplicaba el aforo máximo permitido, en aquel caso tras la denuncia de un ciudadano.

Fuentes policiales y empresarios del ocio nocturno han reconocido que la tragedia del Madrid Arena, de la que el Ayuntamiento culpa al exceso de aforo, ha hecho que ahora haya más presencia policial e inspecciones más intensas, aunque los desalojos y cierres de locales ya se producían antes.

Por ejemplo, a finales de junio de 2012 la Policía Municipal de Madriddesalojar un bar del distrito de Chamartín en el que se celebraba una fiesta con más aforo del permitido y las copas eran servidas por menores de edad.

En febrero de ese año fue desalojado un bar restaurante en el distrito de Barajas en el que se estaba celebrando una fiesta con exceso de aforo, y en la que, además, se estaba vendiendo alcohol a menores de edad.

Actualmente, el PP quiere modificar en la Asamblea de Madrid la Ley de Espectáculos para endurecer el régimen sancionador.

Según el PP regional, la modificación es consecuencia de su "compromiso" con Isabel de la Fuente, madre de unas de las jóvenes que falleció en el Madrid Arena.

Fuente: El Mundo